García y Rahm se apuntan al The Open

La primera jornada de The Open ha dejado dos conclusiones claras; Royal Portrush es un ‘campazo’ en cualquiera de los sentidos y acepciones que quieran darle a la palabra, y el convencimiento de que este torneo es el más especial. Es el único capaz de hacerte pasar frío en verano, en el que hay veces que un paraguas no sirve cuando llueve, el que reparte lluvia o sol en cuestión de minutos, birdies o drama. El único en el que los oriundos van en bermudas y comen helados sea cual sea la temperatura, es el British Open, el Open Británico, mejor dicho The Open, así es como quieren ahora que le llamemos.

Solo han pasado 18 hoyos y tantas cosas desde que Darren Clarke pegara el primer golpe a las 6:35 de la mañana. Emiliano Grillo hizo un hoyo en uno, Royal Portrush, y David Duval 14 golpes en un hoyo. Por si fuera poco, Portush ha dejado KO a dos de los principales alicientes de este último y esperado major. Lo de Tiger Woods se veía venir, sus declaraciones previas eran bastante premonitorias y reveladoras, «no llego en mi mejor momento», el +7 corroboraba sus palabras. Sin embargo lo de Rory Mcilroy ha sido na desagradable sorpresa; que si le han salido los dientes en estos roughs, que si hizo 62 golpes con 14 años aquí, que si ocupaba el número uno en todas las casas de apuestas…; primer golpe fuera de límites y cuádruple bogey en el hoyo uno. Por si sabia alguna tímida esperanza el norirlandes cerraba con triplebogey en el 18 para entregar un +8 que le deja tendido en la lona con la cuenta en el numero 9. Más allá del símil pugilístico, Rory doy un ejemplo de profesionalidad en cómo atendió a los medios tras la debacle; sereno, sincero y amable, que cada cual saque sus conclusiones..

García y Rahm, posicionados

En medio del drama, dos españoles, Sergio García y Jon Rahm llegaron a -3 por caminos muy diferentes pero ambos, muy meritorios. García lo hizo a base de consistencia, confirmando que ha vuelto el jugador gigante que todos conocemos, además de regresar Sergio vive esta semana de Open como el niño que pisa Disneyworld. Pudieron ser menos golpes y más putts en el fondo del hoyo, pero como él mismo nos confirmó, lo más importante es que ha recuperado las sensaciones. El de Castellón estaba exultante.

Declaraciones de Jon Rahm tras la primera jornada.

Rahm terminó contrariado, de más a menos, ‘falta de compromiso’ o más bien ‘de concentración y de preparación en los golpes’ así definió algunos malos swings como el segundos golpes del 11, del 15, del 17 o del hoyo 18. Todo se tradujo en dos bogeys finales. Pero que no salten las alarmas; «es algo fácil de corregir», apuntillaba el de Barrika. A Seve esté donde esté, se le arquearon las cejas al ver el nombre español en los más alto de la tabla clasificatoria en el transcurso del primer día. Al final ambos terminaron a dos, de JB Holmes, sorprendente líder norteamericano tras estos primeros 18 hoyos.