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Los cadáveres de Tiger Woods

Tiger Woods creció obsesionado por llegar a ser el mejor golfista de la historia. Pero la presión de su padre Earl iba mucho mas allá; quería que fuera el mejor deportista, el más venerado. El ex-boina verde estaba convencido de que su hijo era el elegido para cambiar el Mundo a través de sus gestas deportivas. Sin duda, la primera a su alcance era establecer un récord que nadie en la historia del golf amateur había podido lograr; conquistar tres US Amateur consecutivos. Bobby Jones, considerado el mejor golfista aficionado de la historia había logrado ganar dos consecutivos hasta en dos ocasiones, pero el tercero se le había resistido. El joven y entonces espigado Woods no vaciló a la hora de conseguir su triunvirato en el Us Amateur en los años 1994, 95 y 96, y por el camino, el depredador Tiger, dejó tres cadáveres, tres jóvenes y prometedoras estrellas del golf que tienen un punto en común; el logro más conocido de sus respectivas carreras fue ser víctima de Tiger Woods. Ninguno llegó a hacer carrera exitosa en el Mundo profesional, Khuene, Marucci y Scott son los derrotados y olvidados del Tigre.

Kuehne, la remontada en el TPC Sawgrass

Ernest W. «Trip» Kuehne III fue la primera víctima en el Us Amateur disputado en el TPC de Sawgrass en 1994. En aquella final Kuehne llegó someter a Tiger con seis hoyos de ventaja, pero la reacción del californiano pasó a la historia con un ataque final extraordinario. El último birdie en el mítico hoyo 17 pateando desde fuera del green le puso por primera vez por delante en el partido. Kuehne estaba ya destrozado.

Woods tras embocar el birdie en el hoyo 17 del TPC Sawgrass en el Us Amateur de 1994.

Trip Kuehne nació en Dallas en una familia con enorme tradición golfista (Hank y Kelli, sus hermanos jugaron en el PGA y LPGA, respectivamente). Su entrenador fue Hank Haney (el destino haría que Haney terminara trabajando con Woods). Kuehne era una de las principales estrellas del golf amateur, compañero de habitación de Phil Mickelson en Arizona State, hasta su sonado traspaso a Oklahoma State. Sin embargo aquella derrota lo marcó. «Si el resultado hubiera sido diferente, podría haber cambiado la decisión que tomó con su vida», comentó años después su hermana Kelli. «Creo que la dura realidad fue que jugó los mejores 36 hoyos que pudo jugar en su vida y no ganó». A raíz de aquello Trip tomó una de las decisiones más importantes de su vida. «Creo que fue una decisión bastante seria para él», la joven promesa del golf decidió no hacerse profesional y continúo durante años jugando al golf a gran nivel amateur, decidiendo años más tarde apostar por su familia y el trabajo. Actualmente vive con su mujer y su hijo en Irving (Texas) y trabaja para una empresa de inversión de capital.

‘Buddy’ Marucci y sus concesionarios de coches.

Dentro de las tres víctimas de esta historia, probablemente ‘Buddy’ Maruchi fuera el que menos proyección mostraba. En aquel Us Amateur de 1995, Maruchi se presentaba como el auténtico ‘outsider’. El cuatro veces campeón Amateur de Pensilvannia, comercial de un concesionario de Mercedes Benz, se medía a sus 43 años contra un Woods de 19, que acudía obsesionado a por su segunda corona consecutiva. Tiger Woods se llevó la final con dos hoyos de diferencia. Marucci continuó su carrera de amateur y actualmente es propietario de cuatro concesionarios de coches.

Tiger Woods en su enfrentamiento con Marucci en 1995.

Steve Scott, el caballero

Steve Scott era una estrella emergente de 19 años, a punto de empezar su segundo año en la Universidad de Florida. De Scott llamaba la atención su caddie; una atractiva rubia de 19 años del equipo femenino de golf con la que Scott llevaba saliendo desde hacía poco tiempo. En torno al primer hoyo de aquella final en Pumpking Ridge había unas 15.000 personas.

Desde el primer momento de la final Tiger Woods se mostró distante y arrogante. Scott respondía a cada buen golpe de Woods con una frase cortés mientras Tiger ni siquiera levantaba la mirada ni articulaba mínimo signo de agradecimiento; ni por supuesto el más mínimo reconocimiento a los buenos golpes de su rival. Aquel Tiger era como definió su padre entonces un perfecto ‘asesino cualificado’.

«Estaba a punto de patear desde una posición equivocada, automáticamente le hubiera hecho perder el hoyo. Scott entonces pronunció diez palabras para la historia: «Oye Tiger; ¿la has vuelto a colocar en su sitio?».

La final no iba bien para Woods tras los primeros 18 hoyos, el californiano marchaba cinco abajo en su intento de hacer historia en el Us Amateur. Tras los nueve primeros hoyos de los últimos 18, Woods había conseguido recortar y colocarse a un hoyo de desventaja. Pero llegó el hoyo 16, sin duda, clave en la final y en la historia de los éxitos deportivos de Woods. Tiger tenía un putt de dos metros para birdie en la trayectoria de la bola de Scott que gentilmente le pedió que moviera su marca. Así lo hizo. Scott embocó un putt tenso de par y mientras abandonaba el hoyo vio por el rabillo del ojo como Tiger estaba colocando su bola olvidando que había movido su marca. Estaba a punto de patear desde una posición equivocada, automáticamente le hubiera hecho perder el hoyo. Scott entonces pronunció diez palabras para la historia: «Oye Tiger; ¿la has vuelto a colocar en su sitio?». Woods se congeló por unos segundos y sin mediar palabra, como un autómata, corrigió su marca y embocó su putt de birdie empatando la final a falta de dos hoyos. Tiger se alejó sin hacer comentario alguno, ni si quiera un simple ‘gracias’. Al final de los 36 hoyos empataron y en el desempate Tiger Woods se deshizo sin piedad de Scott. Ni en las entrevistas posteriores, ni el entrega de premios hubo alusión alguna al gesto de deportividad de Scott. Tuvieron que pasar 20 años para que Tiger Woods reconociera públicamente en un documental el gesto deportivo de su rival. Por su parte Scott siguió con su carrera. En 1999 fue declarado mejor amateur de Estados Unidos y se casó con su novia Kristi. Tras un par de infurtuosos intentos, decidió alejarse de la competición e iniciar su carrera como profesor de golf y padre de familia.