El Open y Royal Portrush ya está repartiendo drama a diestro y siniestro. La lluvia y el viento contribuyen en esta primera ronda a algunos desastres que los jugadores están sufriendo en sus propias carnes. David Duval ha sido el más castigado al firmar 14 golpes. Duval empezaba con dos birdies, pero en el hoyo 5 firmaría el primer desastre del día en forma de cuádruple bogey, aunque lo peor estaría por llegar en el hoyo 7. Tras perder dos bolas, jugaba su tercera, pero al llegar al green se daba cuenta de que no era su bola y había jugado una equivocada, dos más de penalidad y vuelta al punto para buscar su bola. Tras los tres minutos reglamentarios, la bola no aparece y tiene que volver al tee con la penalidad correspondiente, allí está pegando su noveno golpe, para terminar el hoyo con 14.
No ha sido el único en sufrir, la gran estrella local y principal favorito Rory Mcilroy comenzaba con ocho golpes en el hoyo 1 y el joven chileno Joaquín Niemann tropezaba con seis golpes en el par tres hoyo 6.