Bubba Watson se pasó su carrera universitaria en el banquillo

La curiosa historia universitaria del doble ganador del Masters

El domingo vivimos un enfrentamiento entre dos Bulldogs, antiguos alumnos de la Universidad de Gerogia. Por un lado Bubba Watson, doble ganador de la chaqueta verde, y por el otro Kevin Kisner, imbatido antes de afrontar la final. La Universidad de Georgia ha dado grandes golfistas y no era de casualidad que dos ex-alumnos se vean las caras en el PGA TOUR. La lista de jugadores del tour que han pertenecido a los Bulldogs es extensa: Patrick Reed, Russel Henley, Brian Harman, Chris Kirk, Hudson Swafford, Harris English, Erick Compton, Brendon Todd y Lee McCoy siendo el más reciente. Además, en el lado femenino las españolas son más que conocidas entre las filas de los Bulldogs. La más reciente incorporación fue la de la Asturiana Paula Neira, pero recordamos a Harang Lee y Marta Silva como pertenecientes al equipo de la Universidad de Georgia.

Ahora centrándonos más en la estrella de la semana, Bubba Watson, he aquí su experiencia universitaria como Bulldog.

El acaparador de once victorias en el PGA TOUR, nació en Bagdad, un pequeño pueblo de menos de dos mil habitantes del estado de Florida. El joven Bubba estudió en el mismo instituto que Boo Weekly y apuntaba a incorporarse al equipo de los Bulldogs de la Universidad de Georgia.

Pero las notas de Watson no le permitieron unirse a los Bulldogs. Chris Haack, por entonces coach de la Universidad de Georgia, le ayudó a buscar una segunda opción. Este plan B acabó siendo el Coastal Alabama Community College, donde podía graduarse en tan solo 2 años. En esta pequeña universidad, Bubba consiguió ser nombrado All American, un término usado para listar a los mejores jugadores amateurs del momento en cada deporte.

Tras graduarse, Bubba obtuvo una beca deportiva en la Universidad de Georgia, donde jugó en los años 2000 y 2001 con Chris Haack como coach.

Durante su primera temporada el “novato” consiguió una victoria en su debut universitario, el Schenkel Invitational. Aunque ese mismo año los Bulldogs consiguieron el campeonato de la conferencia Sureste, Watson solo participó en el campeonato nacional en el que fueron eliminados por Wake Forest. Gracias a su éxito, Bubba Watson y 4 compañeros más fueron nombrados All-American.

Photo by American Junior Golf Association

Pero durante la temporada siguiente Bubba volvió a quedarse en el banquillo porque, al parecer, Chris Haack tenía un equipo tan bueno que podía prescindir del joven Watson. Sus compañeros de oficio no le culpan, ha sido la única vez en la historia de la NCAA que 5 jugadores eran nombrados All-American. Mientras que Bubba no era elegido para competir, el equipo formado por Erik Compton, Nick Cassini, Bryant Odom y Ryan Hybl ganaron 7 campeonatos esa temporada, algunos con más de 20 golpes de ventaja. Por desgracia, esa temporada Bubba solo pudo disputar el Schenkel Invitational donde era el defensor del título.

«Pero durante la temporada siguiente Bubba volvió a quedarse en el banquillo porque, al parecer, Chris Haack tenía un equipo tan bueno que podía prescindir del joven Watson».

En USA lo normal es jugar rondas de clasificación previas a los torneos para determinar los jugadores que competirían en el mismo. Pero aun así la decisión final sigue residiendo en el coach. Chris Haack siempre se ha defendido diciendo que no sabe porque dejó a Bubba fuera.

Los rumores cuentan una anécdota durante el campeonato nacional del año 2000. Al parecer Haack prohibió que sus jugadores atacaran los greens de los pares 5 en dos golpes y Watson le desobedeció. Parece que esta técnica le ha valido para conseguir dos chaquetas verdes, ya que según la página web de PGA TOUR Watson ataca de dos los pares 5 en un 73% de las ocasiones. Aun así, ninguno de los involucrados dicen que eso fuera una razón para lo que pasó la temporada siguiente.

Años después, Bubba ha reconocido públicamente que fueron dos años muy duros para él, pero que aprendió mucho de ese bache: “No sabía que le pasaba por la cabeza a mi coach. Solo sabía que estaba dolido porque fui nombrado All-American y no tenía la oportunidad de jugar. Pero aquello me hizo más fuerte como golfista. En ese momento de tu vida cualquier problema parece el peor del mundo, pero no era para tanto. Esto me ayudó a entrenar tanto como podía, al tener que quedarme en la universidad.”

Aunque Bubba no consiguiera graduarse ese año, pasó el suficiente tiempo en la universidad como para conocer a la que ahora es su mujer, Angie. Y como algunos ya saben, la historia tiene un final feliz, Watson volvió a la Universidad de Georgia en 2008 para acabar su carrera y desde entonces lucir orgulloso la icónica “G” de los Bulldogs en su bolsa.