El Us Open edulcorado llega a su ecuador con la tercera media de golpes más baja en toda la historia de la competición. Los 72,63 golpes de media acumulada tan solo han sido superados por con los 72,29 de Olimpya Fields en 2003 y los 72,35 de Baltusrol de 1993.
En las tres últimas ocasiones en las el US Open viajó hasta Pebble Beach tanto en 2000 como en 2010 solo cinco jugadores estaban bajo el par tras los primeros 36 hoyos, mientras que ayer el torno dejó a 31 jugadoras en números rojos.
Esperando a las condiciones del sábado
Está ‘benévola’ preparación en el considerado torneo más duro del planeta es la consecuencia de la masacre de Shinnecock Hills consumada hace ahora un año. La pregunta es si la USGA dará un golpe de tuerca, si tienen reservada alguna sorpresa para la tercera jornada de hoy sábado. La clave será los greenes, tienen suficiente margen de maniobra y poco a poco han ido regulando su firmeza. Aunque esta edición del US Open puede marcar un cambio de tendencia en la preparación tradicional de este torneo, estoy convencido que tampoco a la USGA le entusiasma ver a Gary Woodland en -9, superando incluso los ocho golpes bajo par que el extraterrestre Tiger Woods tenía a estas alturas en 2010 (al final ganaría con 15 y único jugador bajo el par). Estaremos expectantes de cara a la última jornada.