Arrancaba la temporada 2017, la primera con tarjeta del PGA Tour para Jon Rahm. El Safeway en Nappa Valley suponía el comienzo de una nueva etapa en la vida del jugador de Barrica, que había deslumbrado es sus primeras apariciones como profesional desde el US Open de 2016 logrando sacar la tarjeta del mejor circuito del mundo en tiempo récord.
Solo pasaron 40 minutos, cuarto golpes con tarjeta del PGA Tour, para que Jon Rahm en su quinto impacto embocara directamente desde el tee del hoyo 11 para lograr su primer hoyo en uno como profesional y el primer ‘Rahmbonbazo’. Desgraciadamente de aquel genial golpe, no queda testimonio televisivo ni gráfico, más allá del vino que llevó a la sala de prensa para celebrar el golpe con los medios acreditados.
Desde entonces han sido más de cuatro años como profesional y 12+1 victorias (la no oficial del Hero World Challenge). Pero junto a los grandes triunfos sorprende la capacidad de Rahm de fabricar golpes de espectáculo bajo máxima presión. «Hombre, la primera vez puede ser casualidad, pero la tercera ya no», contestaba ayer Jon en rueda de prensa virtual desde East Lake a nuestro compañero de El Pais, Juan Morenilla. «No quiero sonar a chulo, pero hago todos estos golpes con la intención de meterla», concretó el español.
«Hombre, la primera vez puede ser casualidad, pero la tercera ya no»,
JON RAHM
El jugador 10
No es un secreto para nadie que Rahm siempre juega a ganar. Así lo hizo en su primera victoria con un putt de 21 metros en el green del 18 de Torrey Pines. Aquel disparatado putt o el del playoff en el BMW Championship sobresalen por su espectacularidad, pero mérito similar tiene por ejemplo el birdie que hizo el año pasado en el último hoyo en Dubai para lograr el torneo y la Race To Dubai. Manejar esa presión cuando sabes que necesitas un birdie en el último hoyo y hacerlo con aquella solvencia, solo está al alcance de los mejores, sobretodo cuando en su discurso posterior mostraba esa seguridad que exhibió en el campo. Jon estaba convencido de que el birdie no iba a escaparse. Algo similar sucedió con su victoria en la Ryder Cup, con el aliciente de derrotar a su ídolo, Tiger Woods, o el approach imposible en el hoyo 16 de Muirlfield Village, que rubricó su victoria en Memorial. Embocó justo cuando más cercado estaba en la tabla clasificatoria. Y es que Jon lo tiene todo, capaz de arrasar torneos de principio a fin como en Irlanda o sus Open de España o de lograr la magia en el momento exacto para salir en los telediarios. Los ‘Rahmbombazos’ que ya hemos disfrutado y que podemos disfrutaren el video, y sobre todo los que están por venir.